Tiene su origen en el sur de Asia y se cultivaba en la India hace más de 3 mil años. Luego llegó a Grecia y Roma, donde se comercializó a Europa, para que posteriormente Cristóbal Colón lo trajera a América. El pepino cuenta con importantes propiedades beneficiosas para la salud y es un fruto refrescante y rico en agua, especial para épocas de calor.
Propiedades saludables
Para que el pepino crezca bien se requiere de un clima templado generalmente. Este debe comerse fresco para así obtener la mayor parte de sus activos y nutrientes. Según la cultura popular, es un alimento efectivo para el tratamiento de la obesidad, de la gota, para aliviar las picaduras de avispas, como mascarillas para la piel, para aliviar ojos inflamados y cansados, y problemas al corazón. EL pepino es una fuente importante de nutrientes donde el más sobresaliente es el agua, que corresponde a un 97% de la composición. Al estar hecho de mucha agua, sirve en algunas funciones diuréticas y laxantes y es bueno para las dietas para adelgazar y controlar el peso.
En la cáscara del fruto existe una cantidad pequeña de betacarotenos, por lo que es recomendable consumirla sin pelarla. Pelada, pierde toda esa cantidad de pigmento vegetal, que es precursor de la vitamina A. El pepino con cáscara tiene un contenido importante y mayor en vitamina A y fibra. En definitiva, es mejor consumirlos enteros. Una propiedad importante es que tiene capacidad para darla elasticidad a las células, por lo que actúa en las uñas, piel, pelo, entre otras partes.
Cuidados de piel y usos cosméticos
El pepino debe ser uno de los mejores productos naturales para cuidar la piel. Esto se debe en gran medida, a que tienen una cantidad importante de vitamina E, agua y aceites naturales, especiales para los cuidados externos. El pepino aplicado en la piel directamente le aporta a esta todos estos componentes, logrando suavizarla e hidratarla. Así le devuelve la frescura y la textura que se va deteriorando a raíz de los problemas ambientales o de la degradación natural que realizan los radicales libre en el organismo. Es a su vez, adecuado para la piel que haya tenido problemas por la sobreexposición al sol.
Se pueden hacer cremas caseras suavizantes, moliendo un par de pepinos en una batidora para luego aplicar la pulpa sobre la piel quemada o enrojecida. Unos quince a treinta minutos bastarán. Para las pieles con dermatitis, quemaduras de otro tipo o con congelaciones, este tipo de crema también es efectiva. Incluso para el acné el pepino hace bien si se aplica en el rostro, reduciendo la cantidad de granos. En caso de rosácea (enfermedad que produce enrojecimiento, espinillas o granos en la piel), son buenas las rodajas de pepino. Así evita el enrojecimiento y desinflama.
En el ámbito de la cosmética, esta fruta es especial para el rejuvenecimiento y para que la piel luzca mejor. El pepino tiene propiedades refrescantes, astringentes y anti grasas. Es por esto que es común que se usen para fabricar mascarillas para el acné, ya que neutraliza la grasa y previene la aparición de espinillas. Además le da mayor suavidad a la piel y reduce las pecas o manchas. Estas propiedades para la protección de la piel, han hecho que muchas cremas para piel, usen al pepino como ingrediente (cremas nutritivas, limpiadoras, etc.) La aplicación externa del pepino reduce las arrugas, mucho más que las cremas más caras del comercio.